viernes, 4 de junio de 2010


Amigo mío, la vida nos juntó, hicimos historia, y ahora todos esos recuerdos valen el oro entero del mundo.

Hoy quiero decirte amigo, sin que la vergüenza me embargue, que fuiste, sos y serás para mí el hermano que la vida me dio.

• Amigo quiero agradecerte por soportar mis defectos, tolerar mis humores, y por sobre todas las cosas por entenderme.

En gratitud por tu amistad, quiero desearte una larga vida, buena fortuna y alegría, en cualquier parte donde te encuentres.

• No te ofendiste cuando levante la voz, no me juzgaste cuando caí en desgracia, no te enfadaste cuando te desoí. Fuiste siempre un amigo. Gracias.

Un puente de mi mundo al tuyo y viceversa; eso es nuestra amistad.

• Los momentos difíciles hicieron que nuestra amistad se hiciera mas fuerte, los buenos nos permitieron disfrutarla.

• No me siento solo, amigo, porque se que cuando te necesite estarás conmigo.

• Me tendiste tu mano para sacarme del barro de la vida. Tu gesto fue tan elocuente, que por primera vez entendí lo que era un amigo sin que hicieran falta palabras.


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